Delegación Gustavo A. Madero
Coordinación de Comunicación Social
5 de mayo del 2011
COMUNICADO DE PRENSA DGAM/CCS/119/11
CONMEMORAN LOBO ROMÁN Y HABITANTES DE SAN JUAN DE ARAGÓN 149 ANIVERSARIO DE LA BATALLA DE PUEBLA
· Ataviados con trajes de indígenas zacapoaxtlas y con el uniforme militar que utilizaron los franceses en 1862, cientos de maderenses escenificaron la batalla ganada por los mexicanos, al mando del General Ignacio Zaragoza.
· Después de escenificar la firma de los Tratados de la Soledad, en el Jardin Revolución, se representó la batalla en la avenida San Juan de Aragón, donde los “zacapoaxtlas” y los “militares franceses” dispararon salvas con sus fusiles.
· La Batalla de Puebla es uno de los eventos más significativos de la lealtad, la fortaleza y la unidad que tiene el pueblo mexicano: Víctor Hugo Lobo Román.
El Jefe Delegacional, Víctor Hugo Lobo Román, encabezó el 149 aniversario de la Batalla de Puebla, en la que el Ejército Mexicano, bajo el mando del General Ignacio Zaragoza, apoyado por indígenas zacapoaxtlas, derrotó al Ejército francés, el cual tocó retirada, al ver la voluntad inquebrantable de defensa de los mexicanos a los fuertes de Loreto y Guadalupe.
En el Jardín Revolución del pueblo de San Juan de Aragón, el servidor público destacó que el 5 de mayo es un día muy significativo para todos los mexicanos, porque se rememora uno de los pasajes históricos de gran valía para nuestro país libre y soberano.
Dijo, sin embargo, que hace falta mucho por hacer y pidió a los mexicanos recordar esos gloriosos momentos de defensa de nuestra soberanía, y trazar con líneas muy claras lo que debemos hacer en el futuro.
“Seguimos teniendo problemas como en aquel entonces. Todavía hay poderosos que intentan usufructuar nuestros recursos naturales. Todavía hay grandes empresas que intentan apoderarse del mercado nacional. Todavía hay intereses mezquinos y poderes fácticos que intentan imponerle al pueblo el rumbo gobernante”, aseveró Lobo Román.
Por ello, convocó a los maderenses y a todos los mexicanos a que “con el orgullo, con la fuerza y la dignidad de los índigenas zacapoaxtlas, pero ahora no con rifles ni con machetes, sino con el pensamiento, vayamos a transformar la realidad y construir un futuro mejor”.
Ante miles de habitantes del lugar, ataviados con la típica vestimenta de los indígenas zacapoaxtlas y otros más con el uniforme militar de los franceses, quienes disparaban salvas con sus fusiles, indicó que “tenemos el ejemplo de nuestro pueblo y de nuestros antecesores. Ahora nos toca construir el futuro que merecen las nuevas generaciones”.
Enfatizó que el 5 de mayo de 1862 se dio una gran lección al mundo de los principios de lealtad, de compromiso y de unidad de los mexicanos.
Posteriormente, acompañado de integrantes de su gabinete, entre ellos la directora de Desarrollo Social, Nora del Carmen Arias, Lobo Román hizo el tradicional recorrido en la escenificación de la Batalla por las calles Emiliano Zapata, Ignacio Allende, José Loreto Fabela, Río de Guadalupe y San Juan de Aragón, entre otras, para regresar nuevamente al Jardín Revolución.
La escenificación tiene su origen en Nexquipaya, Texcoco, de donde eran originarios algunos de los habitantes que años más tarde fundaron el Pueblo de San Juan de Aragón, quienes en 1886 retomaron la costumbre que tenían en su comunidad de representar la batalla.
Esta representación fue retomada en 1914 por los habitantes del Peñón de los Baños, cuando observaron la organización de la misma en San Juan de Aragón.
San Juan de Aragón fue fundado en el 11 de septiembre de 1856 por el presidente Ignacio Comonfort, agregándolo a la municipalidad de Guadalupe, siendo sus habitantes provenientes de tierras texcocanas, de donde se trasladó la tradición de representar la Batalla de Puebla a sus calles.
La conmemoración del 149 aniversario de la Batalla de Puebla incluyó el pasaje histórico de la firma de los Tratados de la Soledad, en los cuales el Gobierno Mexicano hacía notar la importancia de que las naciones acreedoras: Inglaterra, España y Francia respetaran la soberanía territorial, y aceptaran una negociación respecto a los adeudos económicos que tenía México con esos países.
Inglaterra y España aceptaron y reconocieron esos Tratados. Decidieron resolver las diferencias por la vía diplomática, no así Francia, que quiso imponer intereses excesivos a la deuda de México; hacerse del control de las aduanas de nuestro país, y pretendió imponer un Gobierno monárquico.
Al recibir la negativa del Gobierno de la República, las tropas francesas avanzaron desde Veracruz, donde habían desembarcado junto a las inglesas y las españolas.
Con plena certeza de llegar a la Ciudad de México para imponer las decisiones del Gobierno europeo, encontraron en Puebla a las tropas del Ejército Mexicano, al mando del general Ignacio Zaragoza, entonces Ministro de Guerra y Marina, las cuales apoyadas por indígenas zacapoaxtlas, lograron detener y hacer que tocara retirada el Ejército francés.
Después de escenificar la firma de los Tratados de la Soledad, en el Jardin Revolución, se representó la Batalla de Puebla en la avenida San Juan de Aragón, donde los “zacapoaxtlas” y los “militares franceses” dispararon miles de salvas con sus fusiles.
Coordinación de Comunicación Social
5 de mayo del 2011
COMUNICADO DE PRENSA DGAM/CCS/119/11
CONMEMORAN LOBO ROMÁN Y HABITANTES DE SAN JUAN DE ARAGÓN 149 ANIVERSARIO DE LA BATALLA DE PUEBLA
· Ataviados con trajes de indígenas zacapoaxtlas y con el uniforme militar que utilizaron los franceses en 1862, cientos de maderenses escenificaron la batalla ganada por los mexicanos, al mando del General Ignacio Zaragoza.
· Después de escenificar la firma de los Tratados de la Soledad, en el Jardin Revolución, se representó la batalla en la avenida San Juan de Aragón, donde los “zacapoaxtlas” y los “militares franceses” dispararon salvas con sus fusiles.
· La Batalla de Puebla es uno de los eventos más significativos de la lealtad, la fortaleza y la unidad que tiene el pueblo mexicano: Víctor Hugo Lobo Román.
El Jefe Delegacional, Víctor Hugo Lobo Román, encabezó el 149 aniversario de la Batalla de Puebla, en la que el Ejército Mexicano, bajo el mando del General Ignacio Zaragoza, apoyado por indígenas zacapoaxtlas, derrotó al Ejército francés, el cual tocó retirada, al ver la voluntad inquebrantable de defensa de los mexicanos a los fuertes de Loreto y Guadalupe.
En el Jardín Revolución del pueblo de San Juan de Aragón, el servidor público destacó que el 5 de mayo es un día muy significativo para todos los mexicanos, porque se rememora uno de los pasajes históricos de gran valía para nuestro país libre y soberano.
Dijo, sin embargo, que hace falta mucho por hacer y pidió a los mexicanos recordar esos gloriosos momentos de defensa de nuestra soberanía, y trazar con líneas muy claras lo que debemos hacer en el futuro.
“Seguimos teniendo problemas como en aquel entonces. Todavía hay poderosos que intentan usufructuar nuestros recursos naturales. Todavía hay grandes empresas que intentan apoderarse del mercado nacional. Todavía hay intereses mezquinos y poderes fácticos que intentan imponerle al pueblo el rumbo gobernante”, aseveró Lobo Román.
Por ello, convocó a los maderenses y a todos los mexicanos a que “con el orgullo, con la fuerza y la dignidad de los índigenas zacapoaxtlas, pero ahora no con rifles ni con machetes, sino con el pensamiento, vayamos a transformar la realidad y construir un futuro mejor”.
Ante miles de habitantes del lugar, ataviados con la típica vestimenta de los indígenas zacapoaxtlas y otros más con el uniforme militar de los franceses, quienes disparaban salvas con sus fusiles, indicó que “tenemos el ejemplo de nuestro pueblo y de nuestros antecesores. Ahora nos toca construir el futuro que merecen las nuevas generaciones”.
Enfatizó que el 5 de mayo de 1862 se dio una gran lección al mundo de los principios de lealtad, de compromiso y de unidad de los mexicanos.
Posteriormente, acompañado de integrantes de su gabinete, entre ellos la directora de Desarrollo Social, Nora del Carmen Arias, Lobo Román hizo el tradicional recorrido en la escenificación de la Batalla por las calles Emiliano Zapata, Ignacio Allende, José Loreto Fabela, Río de Guadalupe y San Juan de Aragón, entre otras, para regresar nuevamente al Jardín Revolución.
La escenificación tiene su origen en Nexquipaya, Texcoco, de donde eran originarios algunos de los habitantes que años más tarde fundaron el Pueblo de San Juan de Aragón, quienes en 1886 retomaron la costumbre que tenían en su comunidad de representar la batalla.
Esta representación fue retomada en 1914 por los habitantes del Peñón de los Baños, cuando observaron la organización de la misma en San Juan de Aragón.
San Juan de Aragón fue fundado en el 11 de septiembre de 1856 por el presidente Ignacio Comonfort, agregándolo a la municipalidad de Guadalupe, siendo sus habitantes provenientes de tierras texcocanas, de donde se trasladó la tradición de representar la Batalla de Puebla a sus calles.
La conmemoración del 149 aniversario de la Batalla de Puebla incluyó el pasaje histórico de la firma de los Tratados de la Soledad, en los cuales el Gobierno Mexicano hacía notar la importancia de que las naciones acreedoras: Inglaterra, España y Francia respetaran la soberanía territorial, y aceptaran una negociación respecto a los adeudos económicos que tenía México con esos países.
Inglaterra y España aceptaron y reconocieron esos Tratados. Decidieron resolver las diferencias por la vía diplomática, no así Francia, que quiso imponer intereses excesivos a la deuda de México; hacerse del control de las aduanas de nuestro país, y pretendió imponer un Gobierno monárquico.
Al recibir la negativa del Gobierno de la República, las tropas francesas avanzaron desde Veracruz, donde habían desembarcado junto a las inglesas y las españolas.
Con plena certeza de llegar a la Ciudad de México para imponer las decisiones del Gobierno europeo, encontraron en Puebla a las tropas del Ejército Mexicano, al mando del general Ignacio Zaragoza, entonces Ministro de Guerra y Marina, las cuales apoyadas por indígenas zacapoaxtlas, lograron detener y hacer que tocara retirada el Ejército francés.
Después de escenificar la firma de los Tratados de la Soledad, en el Jardin Revolución, se representó la Batalla de Puebla en la avenida San Juan de Aragón, donde los “zacapoaxtlas” y los “militares franceses” dispararon miles de salvas con sus fusiles.
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